La microelectrónica puede salvar un equipo que la mayoría de la gente da por perdido. La foto recibida por Whatsapp del desesperado cliente: 3 pines rotos Me contacto un cliente con un procesador que ya no funcionaba: tenía patitas rotas. Luego de tranquilizarlo y explicarle que aún era reparable lo recibí en este estado: Debía reemplazar 3 pines, por lo cual recurrí a otro procesador que tenía en corto circuito, totalmente irreparable, pero un excelente donante para estos casos. Detalles de las roturas Luego de extraer 3 patas sanas del donante. Soldando la primer patita: La segunda patita: Luego de soldar la 3er y última patita: El procesador ya reparado: Luego de enderezar algunas patitas torcidas probé el procesador en una placa y confirme una reparación exitosa. Un trabajo bien hecho que dejo al cliente aliviado y a mi satisfecho.